Dinero, mentiras y amenazas: nuevos chats entre Fabiola Yáñez y Alberto Fernández

En el marco de la causa por violencia de género que enfrenta Alberto Fernández, se conoció recientemente una conversación por chat entre el ex presidente y su ex pareja Fabiola Yañez. En dichos mensajes, la ex primera dama le reprocha al ex mandatario por hacer declaraciones que ella calificó como "cosas de psicópata", luego de que él le dijera que solo esperaba morirse "solo en el departamento" y que "alguien" lo encontrara y le avisara a ella. Fabiola respondió con firmeza: "No te creo nada".

El fiscal Ramiro González recibió una copia de las conversaciones aportadas por la querella, mientras que el juez Julián Ercolini rechazó los testigos presentados por la defensa. En uno de los mensajes, Yañez recordó: "Me dabas sopapos y me dejabas la cara hirviendo", un testimonio clave en la denuncia presentada el pasado 7 de agosto.

La tensión entre ambos quedó evidenciada en varios intercambios. En uno de los chats, Fernández escribió: "Mis ganas de vivir no existen. Soñaba otra cosa a tu lado. Te pido perdón por el daño que sin querer te he causado". A lo que Fabiola respondió: "Ya hablé con Juan Pablo, quédate tranquilo, voy a hacer lo que me dijiste que había que hacer".

Otro mensaje destacado muestra el dolor que ambos expresan por su hijo en común, Francisco. Fernández dijo: "Siempre te voy a amar y cuidar. No tenés que dudar de eso", mientras que Yañez se quejaba: "Durante 14 años me enfermaste con tu proceder enfermizo de tener 20 mujeres a la vez".

El intercambio revela una relación llena de tensiones y resentimientos, especialmente cuando Fabiola le recriminó: "Porque vos me enterraste en vida". Fernández, por su parte, señaló: "Vos estás ahí porque la política es cruel. Si hubiera sido reelecto, no estarías allí".

Finalmente, en uno de los últimos mensajes, Yañez expresó su hartazgo: "Decime hoy si me vas a ayudar o no, o a partir de mañana empiezo yo a ganarme la vida aceptando lo que me ofrezcan", mientras que Fernández cerró con un mensaje de resignación: "Hacé tu vida y sé feliz. Nunca le digas a Francisco que lo abandoné o que no lo quise".